El argentino Carlos Delfino y el español Rudy Fernández están siguiendo esta temporada líneas bien diferentes en su juego, pero anoche abrazaron sus trayectorias. Ambos destacaron en los triunfos de sus equipos, Milwaukee Bucks y Portland Trail Blazers.
Los Bucks vapulearon a los Heat en Miami con 15 puntos, 8 rebotes y 5 asistencias de Delfino; los Blazers vapulearon también a su rival, Minnesota, y también a domicilio, con 18 puntos del español.
La noche trajo la participación en el juego de Carlos Arroyo tras su polémica detención y la explosión de juego de un compañero de Rudy Fernández, el francés Nicolas Batum.
Además, los Pistons perdieron en Oakland con papel secundario de Charlie Villanueva.
Miami 71 Milwaukee 94
No hubo color. Estos Heat sin Wade no son lo mismo, no son tan fieros como podrían ser. Y bien que los aprovecharon los Bucks, que además les tienen atrapada la medida, tal y como atestiguan las 3 victorias logradas en lo que va de temporada por los de Wisconsin sobre los de Florida.
Había expectación por ver qué pasaba con Carlos Arroyo. Y no pasó nada, mas que jugó. Eso sí, menos minutos de los habituales dado todo lo que le ha rodeado en las últimas horas tras su polémica detención por parte de la policía. El armador boricua disputó 12 minutos para 3 puntos, 2 rebotes y 2 robos. Poco importó en un partido tan desigual.
El desastre ofensivo de Miami ante un equipo con defensa exigente resultó indiscutible. Anotaron los locales 71 puntos tras una segunda parte de horror y su juego se vino abajo de poco asociativo que fue, pues sólo dieron 9 asistencias en todo el choque.
Los Heat aguantaron el tirón visitante en los primeros 24 minutos (45-50), pero naufragaron ofensivamente en la reanudación al sólo meter 26 tantos en los siguientes 24 minutos, 12 en el tercer cuarto y 14 en el último.
Fue así que los Bucks terminaron paseándose por Florida con un más que resolutivo Carlos Delfino, que se aplicó en todas las variantes del juego para darle a los suyos 15 puntos, 8 rebotes y 5 asistencias en 36 minutos de juego, en los que anotó 3 de 5 en los intentos dobles y 3 de 6 en los triples.
El santafesino estuvo entre lo más granado de su bando junto a John Salmons, que hizo 18 puntos, y Jerry Stackhouse, que aportó 16 desde la banca, 2 jugadores ingresados en Milwaukee hace escasas fechas, bien avanzada ya la temporada.
En Miami, Jermaine O'Neal se salvó, en parte, del desastre ofensivo, siendo el máximo anotador local con 14 tantos. Un oasis bien pequeñito en el desierto de las ideas en el que vivió ayer el equipo de Spoelstra.
Minnesota 91 Portland 110
Por la vía rápida y defensiva quebraron anoche el partido los Blazers en la fría Minnesota. Dejando a los Wolves en 10 puntos en el segundo cuarto para alcanzar el ecuador del encuentro con un cómodo 33-47.
Luego vino la fiesta. La barra libre que dio McMillan en una segunda parte en la que su equipo anotó 63 puntos y donde se pudo ver hasta qué grado de excelente juego puede llegar Rudy Fernández si Portland apuesta más por la alegría ofensiva y menos por el encorsetamiento y el sacrificado trabajo defensivo.
Pero el hombre del partido fue Nicolas Batum, porque el galo jamás había realizado en la NBA un partido del calibre del de ayer. Batum hizo estragos en Minnesota y en 29 minutos de impresión alcanzó cifras de vértigo: 31 puntos, 7 rebotes, 7 asistencias y 3 robos. Se enchufó el alero francés 5 de 8 triples y todo lo hizo bien.
Fue la sensación de la noche, aunque no le fue a la zaga Rudy Fernández, eso sí, en la segunda parte, cuando el partido estaba ya casi decidido y todo se desmadró un poco. El mallorquín hizo 18 puntos en 23 minutos y capturó 4 rebotes, anotando 5 de sus 8 tiros de campo y sus 6 tiros libres. Hizo algunas jugadas espectaculares marca de la casa. Vamos, que se dejó ver un poquito. Como lo hizo el australiano Patrick Mills, que en pleno período basura encestó 8 puntos en 4 minutos.
Batum, Fernández y Aldridge (21 tantos) fueron el soporte ofensivo de unos Blazers que ganaron fácil sin prácticamente aporte anotador o reboteador de figuras claves como Andre Miller, Brandon Roy, que dio 9 asistencias, y Marcus Camby.
Minnesota, mal. Su control del balón fue penoso -3 robos por 19 pérdidas- y su carácter ganador, nulo. Al Jefferson, con 19 puntos y 11 rebotes, fue el único que salvó la cara.
Golden State 95 Detroit 88
Partido sin demasiado atractivo en el Oracle Arena que se decidió del lado local pese a afrontar el choque sin Ellis, Maggette, Randolph y Radmanovic.
Eso da una idea de la decepcionante puesta en escena que volvió a ofrecer Detroit, un equipo que deambula sin pena ni gloria por la competición y que ayer hizo números para perder, como por ejemplo sus 22 pérdidas de balón y su lamentable 11 de 26 en el tiro libre.
Y eso que los Pistons controlaron bien la cosa en la primera mitad, en la que defendieron con agresividad, atacaron con criterio y dominaron el juego hasta irse al descanso 13 puntos arriba (37-50).
Pero es que la segunda parte del equipo de Kuester fue una lástima, por ser finos. Un doble 29-19 en el tercer y cuarto período fabricó un parcial en la segunda mitad de 58-38 que dio la vuelta al marcador.
Los artífices de la remontado fueron jugadores como Stephen Curry -27 puntos-, C.J.Watson -17 con 8 rebotes- y, por encima de todos, un gran Anthony Tolliver, que logró 19 puntos, 14 rebotes y 5 pases de canasta para erigirse en la auténtica estrella del partido.
Mientras, en Detroit, poca chicha. Prince hizo 18 puntos y 8 asistencias, Stuckey se fue a 17 con 7 rebotes y Hamilton sumó 16 con una horrenda serie de 6 de 19 en el tiro.
Lo peor de la noche fue el desacierto en el tiro libre de Ben Wallace (¡1 de 9!), aunque capturara 13 rebotes.
Charlie Villanueva no lo hizo mal y terminó con 7 puntos y 7 rebotes en 17 minutos de juego.
Indiana gana a Chicago
Los Bulls tropezaron en el Conseco Fieldhouse de Indianápolis, donde los Pacers se impusieron por 100 a 90 con actuación estelar de Danny Granger, que consiguió 30 puntos, 8 rebotes y 4 robos.
Murphy y Jones fueron los mejores secundarios de Indiana con 17 puntos cada uno, el segundo en tan solo 20 minutos. Y Roy Hibbert lo hizo bien desde la suplencia.
Por parte de Chicago, Rose fue el máximo artillero con 27 puntos, Gibson y Pargo estuvieron más que correctos y Luol Deng se hizo con 18 rebotes.