Los Angeles Lakers han salido como un tiro. Si en el primer partido ganaron de 20 a Portland, en el segundo se impusieron por 38 a los Clippers con buenos partidos de Pau Gasol y Trevor Ariza. Aunque para partidos el de Charlie Villanueva, pieza vital en la victoria de Milwaukee.
Milwaukee ganó en un pabellón nuevo, el Ford Center del equipo novato de la liga, los Oklahoma City Thunder. Y venció gracias, en buena parte, a la fantástica labor de Villanueva, que terminó con 20 puntos y 12 rebotes.
Mientras, en el duelo angelino los Lakers pasaron por encima de los Clippers de manera salvaje. Gasol desarrolló un partido muy completo (fue el máximo reboteador y pasador de los suyos) y Ariza volvió a encandilar. Se le ve en estado de gracia tras haber afinado, y mucho, su tiro de larga distancia.
Por otra parte, en uno de los duelos más atractivos de la jornada los Suns de Terry Porter ganaron a los Spurs en San Antonio. Popovich no pudo contar con sus dos jugadores argentinos: Ginóbili y Oberto. Y en Phoenix se vio en bastante buen estado a Shaquille O’Neal.
Clippers 79 Lakers 117
Los Lakers de Phil Jackson empiezan a asustar, y eso que esto sólo acaba de comenzar. Y es que el equipo de Gasol y Ariza no solo ha desarrollado en sus dos primeros partidos un juego convincente y ágil en ataque, sino que se ha aplicado a una destructiva defensa llena de dinamismo que ha dejado ahogados a los ataques rivales (Portland 76 puntos y Clippers 79). Y si este equipo encima defiende...
Esta vez oficiaba de local en el Staples Center el equipo pobre de la ciudad, un equipo que dejó eso, una pobre imagen, a pesar de contar con esa artillería pesada que le faltó en la pretemporada (Baron y Ricky Davis y Tim Thomas).
El dominio de los Lakers fue absoluto, tal y como pasara con Portland. En 96 minutos su peor situación ha sido estar 1 punto por debajo de su rival y las individualidades están aparcando su ego para constituir un universo coral en el que todos tienen su hueco.
Anoche, sin ir más lejos, los 12 jugadores que defendieron los colores de los Lakers anotaron y 7 de ellos alcanzaron la decena. El máximo encestador, y esto lo dice todo, fue Kobe Bryant con 16 puntos y el jugador que más jugó fue Gasol con 33 minutos.
El equipo metió el 51,2% de sus tiros de campo, con un 52,6% en el tiro de 3 (10 de 19). Dominó la zona y se impuso con autoridad en los tableros, en gran parte porque hubo muchos más rebotes en su propio aro, ya que los Clippers no alcanzaron el 40% de efectividad y erraron mucho desde la lejana distancia (5 de 22 triples).
Kobe Bryant jugó 30 minutos en los que hizo 16 puntos y 8 rebotes. Pero lo más positivo fue ver la suma del base titular veterano, Fisher, (15 puntos en 22 minutos) y el base suplente joven, Farmar, (15 puntos, 5 rebotes y 5 asistencias), como positivo resultó el dominio de la zona de la pareja Gasol-Bynum, que sumaron 25 puntos y 18 rebotes y anularon a Kaman.
Los hispanos volvieron a brillar. Pau Gasol logró 13 puntos, 9 rebotes y 6 asistencias, anduvo flojo en el tiro de campo (3 de 10) pero perfecto desde la línea de personal (7 de 7). Y Trevor Ariza volvió a encandilar a la afición. En 20 minutos anotó 11 puntos y capturó 6 rebotes. Su dominio del tiro exterior está desconcertando a los que antes criticaban su falta de solidez en ese apartado (4 de 7 de campo con 2 de 3 en triples). Además, anotó sobre la bocina el triple con el que su equipo tomó ventaja en el primer cuarto (27-30).
Fue ése el único momento de igualdad. Ya en el segundo cuarto los visitantes se fueron, en el tercero dos tiros libres de Gasol pusieron 20 puntos de por medio (46-66) que llegaron a doblarse a 57 segundos del final (77-117). Para entonces, los Bryant, Gasol y Bynum llevaban ya muchos minutos descansando en la banda.
En los Clippers, Thornton hizo 16 puntos y Baron Davis, Mobley y Tim Thomas 11 cada uno.
Oklahoma City 87 Milwaukee 98
La tripleta integrada por Michael Redd, Richard Jefferson y Charlie Villanueva se reveló letal. Cada uno aportó 20 puntos a su modo. Jefferson ayudando mucho en el rebote –logró 8- y con muy buen tino en sus acciones, tino que le faltó al tiro de Redd, y Villanueva en estrella.
El dominicano produjo 20 puntos, 12 rebotes, 2 tapones y 2 asistencias en 34 minutos, resarciéndose del mal arranque ante Chicago, si bien volvió a tener problemas con las personales, llegando a ser eliminado.
Junto a todos ellos, destacó la labor de Bogut en la zona y la de Charlie Bell como sexto hombre.
Más de 19.000 aficionados se dieron cita en el Ford Center de Oklahoma City para ver el debut de su equipo en la NBA, equipo cuya herencia, en una grandísima parte, viene de Seattle.
Pero no pudieron ver la primera victoria en la competición de los suyos. Entre otras cosas, porque el equipo local salió nervioso y poco centrado y a partir de ahí se le empezaron a acumular los problemas, el más grave la mala noche de su mejor jugador, Kevin Durant.
Al descanso se llegó ya con una ventaja holgada de los visitantes (35-50), distancia que se consolidó e incluso se incrementó en el tercer acto, que concluyó 59-79.
Los de Scott Skiles, que consiguió su primera victoria con su nuevo equipo, llegaron a dominar por 24 y se tomaron con bastante relajación el final del encuentro.
De los Thunder poco que destacar. Tal vez el buen partido de Wilcox (15 puntos y 7 rebotes) y el más que aceptable debut del novato Westbrook (13 puntos).
San Antonio 98 Phoenix 103
Una leve dolencia cardíaca, una fibrilación auricular, dejó a los Spurs y al partido sin argentinos. Y es que ese problema de última hora dejó fuera de la convocatoria a Fabri Oberto, sumándose así a la ya consabida baja de Manu Ginóbili, que se reveló a lo largo del partido como fundamental.
De hecho, los Spurs tiraron en exclusiva de su pareja Parker-Duncan (64 puntos de los 98 de su equipo, 32 por cabeza). Y es que el citado dúo protagonizó 45 de los 80 lanzamientos a canasta locales, un desequilibrio impropio de un equipo de Popovich.
A ello hay que sumarle que estos Phoenix son otra cosa. Se acabó el jugar a la carrera y crear belleza a partir del desorden aparente. Ahora el control ha pasado a situarse como valor fundamental. El partido de anoche fue un ejemplo: 7 balones perdidos por los locales y 10 por los visitantes.
Estos Suns de Terry Porter habrá que analizarlos a más largo plazo. Por de pronto, en el partido inaugural la pareja Amare Stoudemire (22 puntos y 8 rebotes) y Shaquille O’Neal (15 puntos, 13 rebotes y 2 tapones) funcionó muy bien.
Como funcionó ese seguro de vida llamado Steve Nash (13 puntos y 13 rebotes) y esos dos suplentes de lujo llamados Leandrinho Barbosa (18 puntos en 27 minutos) y Grant Hill (13 en 19).
El partido estuvo preñado de acierto. Ambos equipos se movieron en el 50% de efectividad en el tiro, jugaron con criterio y perdieron pocos balones.
A falta de 3:08 el resultado era de completo equilibrio (94-94). Más tarde, faltando alrededor de 1 minuto y medio, los visitantes dominaban 98-101.
A 7 segundos del final los Spurs intentaron repetir con Duncan la jugada letal y sorprendente que les dio la opción de un triunfo decisivo en el primer partido del playoff que les enfrentó la pasada temporada. Pero esta vez Tim Duncan falló el triple del empate y Barbosa sentenció con 2 tiros libres.